Los científicos acaban de dar la voz de alarma sobre un producto químico, ampliamente presente en artículos de cuidado personal y del hogar, acusado de desencadenar la pubertad precoz en los más jóvenes.
Desde hace varias décadas, la edad de la pubertad no ha dejado de bajar, especialmente en las niñas. Algunos estudios señalan a un posible culpable: el almizcle ambreta, un perfume sintético. Este parece interactuar con una zona clave del cerebro.
Los investigadores del National Institute of Environmental Health Sciences (NIEHS) realizaron un amplio estudio examinando cerca de 10.000 compuestos químicos presentes en diversos productos farmacéuticos, cosméticos y domésticos. Entre estas sustancias, el almizcle ambreta captó particularmente su atención. Pruebas exhaustivas revelaron que este compuesto no solo afectaba a las células hipotalámicas humanas, sino también a las larvas de pez cebra, un modelo comúnmente utilizado en biología para estudiar el desarrollo hormonal.
Las investigaciones, publicadas en
Endocrinology, revelan que el almizcle ambreta podría activar un receptor en el hipotálamo. Esta región del cerebro juega un papel central en la regulación hormonal. Al unirse a este receptor, el almizcle desencadenaría la liberación de hormonas sexuales mucho antes de lo esperado.
Las consecuencias de esta pubertad precoz son preocupantes. Las niñas afectadas podrían estar más expuestas a enfermedades graves en la edad adulta. Esto incluye un mayor riesgo de diabetes, enfermedades cardiovasculares, e incluso cáncer.
A pesar de las restricciones impuestas en Europa y Canadá, el almizcle ambreta continúa siendo utilizado en algunos productos de consumo. Estas regulaciones se han implementado para limitar su uso debido a sus propiedades potencialmente tóxicas, en especial sus efectos neurotóxicos y fototóxicos en el organismo.
Los investigadores insisten en la importancia de este descubrimiento, pidiendo nuevos estudios para confirmar estos resultados. Mientras tanto, se recomienda precaución: se invita a los padres a verificar los ingredientes de los productos que usan sus hijos.