En el sureste de Alaska, una isla, anteriormente oculta bajo el hielo, ha aparecido en medio de un lago formado por el deshielo de un glaciar. Esta rápida transformación del paisaje ofrece una ilustración impactante de los cambios ambientales en curso.
A principios del siglo XX, el glaciar Alsek se extendÃa mucho más allá de su posición actual, cubriendo la zona donde ahora se encuentra el lago Alsek. Se dividÃa en dos brazos para rodear el Prow Knob, llamado asà por su parecido con la proa de un barco. Los glaciólogos Austin Post y Mauri Pelto habÃan predicho esta separación para 2020, pero el proceso tomó un poco más de tiempo de lo previsto.
Lindsey Doermann, redactora cientÃfica del Observatorio Terrestre de la NASA, destaca que en esta región de Alaska, el agua está reemplazando rápidamente al hielo. Los lagos proglaciales, formados por el agua de deshielo, se desarrollan y modifican los paisajes, como lo demuestra la emergencia de esta nueva isla.
El retroceso de los glaciares
El retroceso de los glaciares es un proceso en el que la masa de hielo disminuye y se retira debido al deshielo acelerado. Esto ocurre cuando la temperatura del aire aumenta, reduciendo la acumulación de nieve en invierno y aumentando el deshielo en verano. Los glaciares actúan como reservorios de agua dulce, y su desaparición afecta a los ecosistemas locales y globales.
Los lagos proglaciales, como el formado cerca del Prow Knob, son indicadores directos de este retroceso. Se crean cuando el agua de deshielo es retenida por morrenas u otros obstáculos, modificando la geografÃa y pudiendo a veces provocar inundaciones repentinas si las barreras naturales ceden.