Crédito de la imagen: NASA
El problema de los tres cuerpos trata de predecir el movimiento de tres cuerpos celestes en interacción gravitatoria. Mientras que el movimiento de dos cuerpos en órbita puede describirse a través de ecuaciones simples, la inclusión de un tercer cuerpo complica enormemente los cálculos. Isaac Newton sentó las bases de este problema hace más de 300 años, y desde entonces, los matemáticos han estado buscando soluciones.
Iván Hristov, matemático de la Universidad de Sofía en Bulgaria, y su equipo, emplearon un supercomputador para hallar estas nuevas soluciones. A diferencia de la órbita simple de nuestro planeta alrededor del sol, las órbitas en un sistema de tres cuerpos pueden asemejarse a espirales entrelazadas. Los cuerpos se alejan y se acercan entre sí en un complejo pero predecible ballet.
Estas nuevas soluciones podrían ser muy valiosas para los astrónomos. Los sistemas de tres cuerpos son bastante comunes en el Universo. Sin embargo, la estabilidad de estas órbitas tiene que ser confirmada. Juhan Frank, astrónomo en la Universidad Estatal de Luisiana, es escéptico respecto a su estabilidad a largo plazo.
De acuerdo con Iván Hristov, estas soluciones, sean estables o no, ofrecen un gran interés teórico. Su relevancia física y astronómica se conocerá con mayor precisión tras estudios más exhaustivos sobre su estabilidad.