Un equipo internacional multidisciplinario, que incluye cientÃficos del CNRS Terre & Univers (ver recuadro), se formó para esclarecer las causas, la dinámica y los impactos de esta devastadora inundación.
La inundación se originó en el lago South Lhonak, un gran lago proglaciar ubicado en una región aislada del Himalaya. El 3 de octubre a las 22:12 (hora local), una sección completa de la morrena glaciar en la orilla norte del lago se desprendió. Esta masa de sedimentos y hielo, que medÃa 900 m de largo y 88 m de ancho, colapsó en el lago, creando un tsunami de aproximadamente 20 m de altura.
Esta ola rompió la presa que contenÃa el lago, liberando alrededor de 50 millones de m³ de agua, el equivalente a 20,000 piscinas olÃmpicas. Esta serie de eventos puede estar relacionada con el retroceso del glaciar South Lhonak y el calentamiento del permafrost en respuesta al aumento de las temperaturas en la región.
Al descender por el rÃo Teesta, la inundación arrastró enormes cantidades de rocas y tierra provenientes del lecho y las orillas del rÃo. En muchos lugares, esta erosión provocó el colapso de las laderas sobre el rÃo. Se registraron 45 deslizamientos de tierra causados por la inundación, y aproximadamente 270 millones de m³ de material se añadieron a las aguas de la crecida, aumentando asà el volumen de la inundación en un factor de 5.
Este material jugó un papel clave en los daños causados por la inundación, ya que muchos pueblos afectados rÃo abajo quedaron enterrados bajo metros de arena y grava. Casi la mitad de los edificios dañados por la inundación habÃan sido construidos en los últimos diez años, lo que ilustra cómo la urbanización en zonas de riesgo puede contribuir a las catástrofes.
Miles de lagos glaciares existen en el Himalaya, y las inundaciones por GLOF probablemente representarán un riesgo creciente a medida que los glaciares sigan retrocediendo y el calentamiento del permafrost se intensifique.